Las plantas de fabricación modernas requieren procesos modernos. Y mientras los avances tecnológicos siguen cambiando la forma de fabricar los productos, hay una función que sigue siendo esencial: la de ingeniero de procesos.
Los ingenieros de procesos se encargan de garantizar que el proceso de fabricación se desarrolle con fluidez y eficacia. Esto puede implicar diversas actividades, desde desarrollar nuevos procesos de producción hasta evaluar los existentes y supervisar su aplicación.
También depende de un ingeniero de procesos garantizar que el equipo de producción cumple todas las normas de seguridad y medioambientales.
Los ingenieros de procesos deben tener en cuenta diversos factores en el marco más amplio de la fabricación, como la rentabilidad, la gestión de riesgos y el control de calidad. También pueden participar en la creación o mejora de sistemas operativos, el aprovisionamiento de materiales y el desarrollo y optimización de cadenas de montaje.
A medida que evoluciona la tecnología, también lo hace el papel del ingeniero de procesos: debe estar al día de las tendencias del sector y ser capaz de adaptarse rápidamente a los cambios de los procesos. Es un trabajo difícil, pero puede ser muy gratificante para quienes tengan las aptitudes y la experiencia adecuadas.
Aunque las funciones y responsabilidades pueden variar en función de la industria y la empresa de fabricación, un ingeniero de procesos de fabricación debe tener un conjunto de competencias básicas que le permitan trabajar con eficacia.
Estas son algunas de las expectativas que puede esperar ver en la descripción de un puesto de ingeniero de procesos de fabricación:
Diseño e implantación de procesos: Un ingeniero de procesos debe ser capaz de diseñar y aplicar un proceso que cumpla todos los requisitos de la organización. Esto incluye comprender el flujo de materiales, identificar posibles problemas con los métodos existentes y determinar formas de optimizarlos.
Optimización de procesos: El ingeniero de procesos se encarga de optimizar los procesos de fabricación existentes para aumentar la eficiencia, reducir costes, mejorar la sostenibilidad y maximizar la rentabilidad. Esto suele implicar análisis de datos, simulación y diversas técnicas de optimización.
Garantía y control de calidad: El ingeniero garantiza que los productos fabricados cumplen las normas de calidad establecidas. Esto puede implicar la aplicación de procedimientos de prueba, la creación de métricas de calidad y la colaboración estrecha con el equipo de control de calidad.
Localización y resolución de averías en máquinas: Cuando surgen problemas de fabricación, el ingeniero de procesos debe identificar y solucionar rápidamente el problema. Esto incluye comprender las causas fundamentales, desarrollar posibles soluciones y probarlas en un entorno seguro y controlado.
Seguridad y conformidad: Garantizan que los procesos de fabricación cumplen los reglamentos y normas de seguridad. Deben promover una cultura de seguridad, identificar posibles peligros y mantener y utilizar los equipos de forma segura.
Evaluación e implantación de tecnologías: El ingeniero de procesos evalúa las nuevas tecnologías y determina su aplicabilidad a sus procesos. También puede pilotar la tecnología, gestionar su implantación a gran escala y formar al personal.
Documentación e informes: Mantener registros detallados de la información del proceso, incluidos los índices de producción y los parámetros del proceso, y crear informes que detallen el rendimiento de la fabricación. Por ejemplo, un ingeniero de procesos puede participar en el desarrollo de instrucciones de trabajo digitales para diversos procesos.
Colaboración y trabajo en equipo interfuncional: Los ingenieros de procesos suelen colaborar estrechamente con otros departamentos, como I+D, Calidad y Producción, para lograr el mejor resultado posible del producto. Sirven de punto de contacto técnico y ayudan a coordinar los esfuerzos de toda la organización.
Formación: El ingeniero puede tener que formar al personal en nuevos procesos o procedimientos y asegurarse de que comprenden los matices técnicos de los procesos de fabricación.
Gestión de proyectos: A menudo dirigen o participan en equipos de proyectos interfuncionales destinados a implantar nuevos procesos, productos o cambios significativos en los métodos existentes. Esto incluye la planificación de proyectos, la asignación de recursos, la gestión de plazos y la ejecución.
Los ingenieros de procesos pueden disfrutar de carreras gratificantes y desafiantes, pero hay algunos retos clave a los que pueden enfrentarse. Afortunadamente, su experiencia y conocimientos técnicos pueden ayudarles a superar estos obstáculos.
Reto: Mantener los procesos actualizados en todo el taller
Uno de los principales retos a los que se enfrentan los ingenieros de procesos es encontrar la tecnología adecuada para respaldar los procesos.
Garantizar que todas las máquinas y equipos funcionan al máximo rendimiento puede ser un reto, y cualquier cambio debe aplicarse y supervisarse minuciosamente. Además, actualizar los procesos a medida que evoluciona la tecnología puede suponer un reto constante.
Éstas son sólo algunas de las diferentes tareas que deben gestionar los ingenieros de procesos:
- Supervisar y ajustar los parámetros del proceso para mantener los estándares de calidad
- Solucionar los problemas de los procesos existentes e identificar las áreas susceptibles de mejora
- Dirigir equipos interfuncionales en proyectos relacionados con la producción o la optimización de procesos.
- Coordinarse con otros departamentos como I+D, Calidad y Operaciones para garantizar el cumplimiento de las normas de calidad.
- Garantizar el cumplimiento de los protocolos de seguridad
Aunque el ingeniero de procesos no es la única persona responsable de estas tareas, sí suele ser la que tiene que supervisar todo el proceso
Para ello se requiere un sólido conocimiento técnico de los sistemas y procesos que intervienen en la fabricación. Deben ser capaces de analizar datos, identificar áreas en las que se necesitan mejoras y, a continuación, aplicar soluciones que maximicen la eficiencia y reduzcan los costes.
Desafío: Creación e implantación de instrucciones de trabajo de fabricación completas
Otro reto clave al que se enfrentan los ingenieros de procesos es la creación de instrucciones de trabajo de fabricación completas para el taller.
Las instrucciones de trabajo actúan como una hoja de ruta para los operarios y deben ser lo suficientemente detalladas como para que puedan entender cómo utilizar el equipo correctamente. Además, estas instrucciones deben actualizarse periódicamente con los procedimientos más recientes. No es tarea fácil, teniendo en cuenta lo rápido que cambia la tecnología.
Para garantizar que todos los operarios del taller reciben la formación adecuada y están al día de los cambios en los procesos, los ingenieros de procesos deben tener los conocimientos técnicos necesarios para crear y mantener unas instrucciones de trabajo de fabricación exhaustivas.
Las instrucciones de trabajo digitales pueden ayudar a agilizar este proceso, pero siguen exigiendo un profundo conocimiento de los sistemas y procesos implicados. Al fin y al cabo, el ingeniero de procesos es el responsable último de garantizar el buen funcionamiento del taller.
Desafío: Optimizar los procesos de producción
Por último, los ingenieros de procesos deben garantizar la optimización de los procesos de producción en términos de rendimiento y costes.
Para ello es necesario identificar las áreas ineficaces, determinar las causas profundas y, a continuación, aplicar medidas para mejorar el proceso global. También implica crear informes detallados sobre el estado actual de las operaciones, utilizando herramientas de análisis de datos como los métodos Six Sigma o Lean Manufacturing. Si se hace bien, puede suponer un importante ahorro de costes y un aumento de la eficacia.
Los ingenieros de procesos buscan constantemente formas de aumentar la producción y reducir los gastos. Es un reto continuo que requiere grandes conocimientos técnicos y experiencia.
Comprender los sistemas y procesos que intervienen en la fabricación es sólo la mitad de la batalla: la otra mitad es encontrar soluciones creativas que ayuden a optimizar los procesos de producción.